martes, 24 de mayo de 2011

Nuevos horizontes.

Dejo atras una importante etapa en mi vida. Una etapa de 15 años. Durante todo este tiempo he estado yendo al mismo colegio, viendo a casi la misma gente y llevando a cabo las mismas costumbres. Cada año lo mismo, una continua rutina pero con nuevos retos por cada curso que empezaba. Bachillerato ha sido un importante reto que finalmente he superado. Me llevo un buenísimo recuerdo de mi colegio, de toda la gente y de los profesores. Ha habido momentos de fracaso, momentos en los que creía que no daba para más, mucho estrés, dificultades... Pero ahora miro atrás y veo que todo valió la pena. Cada uno de los momentos vividos durante todo esto tiempo me ha aportado un aprendizaje. Mi estancia en el colegio me ha aportado un amplio bagaje de valores y conocimientos que me han marcado y me han formado tanto como estudiante, como persona.
Hoy me gradúo y así me despido de todo lo vivido en esta época. ¿Y ahora qué? Ahora empieza una nueva etapa. Ahora, según me dicen, empieza la verdadera vida. La universidad, algo que tengo como una cima a la que ya estoy llegando. Estudiante de derecho. Tengo la sensación de que todo esto me queda muy grande. Es un inmenso mundo en el que yo voy a ser una insignificante estudiante de primero, pero conseguiré hacerme un hueco.
No voy a negar mi sentimiento de nostalgia al dejar el colegio, ya que toda mi vida reside entre esas paredes. Pero ha llegado la hora de coger las riendas de mi vida, de que todo dependa de mi, de organizarme por mi cuenta, de ir a mi bola, de espavilarme y sobretodo, de conocer a gente nueva.
Muy dispuesta a nuevos retos, nuevas ambiciones y nuevos horizontes.

lunes, 9 de mayo de 2011

Here forever.


Si partimos de la imagen, parece algo simple: una banda de cuatro chicos tocan para una multitud alocada. En realidad, simple lo es, pero detrás de cada nota, de cada grito, de cada salto, de cada mano que intenta llegar hacia ellos, de cada canción, de cada lágrima, de cada sonrisa y de cada carcajada que se aparece al verlos o ni siquiera eso, sino solamente al escucharlos, esconde un mundo entero.


McFly, grupo británico que empezó hace unos cuantos años, como ellos, decenas de bandas intentan llegar al éxito. Personalmente, supe de su existencia cuando me compré un CD (año 2005) en Londres de muchos artistas mezclados. Alli había una canción de ellos, Five colours in her hair, con el respectivo videoclip. ¿Qué puedo decir? Después de escucharla mil veces me di cuenta de que era una fan y para mi asombro, una de las primeras fans que tenían aquí! De hecho, cuando yo le decía a alguien que escuchaba McFly, la gente me tomaba por loca. ¿Quién? Eso digo yo, ¿quién te ha visto y quién te ve?! Ahora son famosos en todo el mundo, llenan recintos, baten records e incluso les han llamado los 'Beatles contemporáneos'. Siempre me han gustado, siempre han estado alli, siempre he tenido una canción suya para cada situación, siempre han conseguido sacarme una sonrisa y arrancarme alguna que otra lágrima. Ha habido oportunidades para verlos aquí en España, pero no pude ir.
Ayer, 8 de mayo del 2011, después de 6 años esperando para ello, pude verlos en directo. Felicidad en estado puro. Poder cantar las canciones que tanto han significado y significan tanto para mi con ellos es una sensación que no se puede explicar. El hecho de verlos a pocos metros de mi me sacó un inmenso peso de encima, fui enteramente feliz, se me fueron todas las preocupaciones, no me importaba más que saltar, gritar y cantar al lado de mi mejor amiga sus canciones a todo pulmón. Reirme de sus bromas, con ellos; responder a sus preguntas, corregirles cuando no decían bien 'Barcelona'; darlo todo en aquellas frases que significan algo para ti; saltar saltar saltar hasta descargar todo lo que llevas contigo; gritar, reir, llorar en aquellas letras que parecen describir a la perfección tu vida; tenerlos delante; quedarte quieta enmedio de la multitud que no para de saltar y gritar y decirte a ti misma, están aquí, has estado tanto tiempo esperando y ahora el más antiguo de tus sueños se está cumpliendo, y que sin pensarlo y sin quererlo, se te inunden los ojos y empieces a llorar desconsoladamente, pero de pura felicidad.
Ayer fui feliz como solamente en los conciertos de música lo soy. Es una sensación increíble. Cuando tengo a alguno de mis ídolos delante y puedo disfrutar de sus canciones en directo, se me olvida todo, estoy en una burbuja y de alli nadie me baja. Este concierto fue distinto de los demás por la espera que llevaba detrás, la cual, ahora puedo decir, que valió muchísimo la pena.
Ahora no puedo quitarme las imagenes de ayer de mi cabeza, y no lo harán en mucho tiempo ya que todos los conciertos se me quedan grabados de forma privilegiada, no hay nada que se me olvide y recuerdo todos y cada uno de ellos. Se quedan siempre conmigo.
McFly, gracias por hacerme soñar, creer en el amor, levantarme cuando estoy mal, darme los mejores consejos, reir sin parar, sacar una sonrisa sin saber el por qué y además, sin ni siquiera saberlo, GRACIAS.

It's not always easy, but McFly is FOREVER.

lunes, 2 de mayo de 2011

Dosis de optimismo.


Todos valemos, todos estamos capacitados para realizarnos como personas, todos podemos ser felices, todos podemos ser y hacer lo que nos propongamos, todos podemos con todo, todos podemos superar los problemas, las adversidades y los obstáculos, todos podemos vivir de una forma que nos llene, todos podemos tener a gente a nuestro lado que nos quiera, todos podemos querer, todos podemos hacer todo.
Qué falta? Proponerselo, concentrarse e ir a por ello. He decidido que no me sirven los "es imposible", "no puedo con todo", "mejor ni intentarlo". Se acabaron! No hay nada imposible así que toca levantarse con el pie derecho, saltar de la cama, ir a por ello, hacer del día algo aprovechable.
Mi lema? Una sonrisa y hacia adelante, de momento nunca me ha fallado.
You've got every right to a beautiful life.

domingo, 1 de mayo de 2011

Madres.

Siempre ellas, siempre presentes, siempre consejeras, amigas, autoritarias pero cariñosas, siempre preocupadas, siempre al corriente, siempre dispuestas a todo, siempre disponibles, siempre con una bonita sonrisa en la cara, siempre con los brazos abiertos, siempre, siempre siempre.

Si algo me ha enseñado la vida en mis casi 18 años de vida es que las madres SIEMPRE tienen razón. Aún no he vivido la excepción que confirma esta regla, pero para mi sigue siendo la mayor norma. Siempre la tengo presente. Aunque crea que lo que me dice no está bien, lo acabo haciendo y siempre acierto.

Una madre es lo más grande, se lo debemos todo, le debemos la vida y por eso hay que cuidarlas, respetarlas, hacerles caso, abrazarlas y quererlas, quererlas hasta la infinidad.

Feliz día de la madre.