Todos (quizá sería más indicado decir "todas"), hemos soñado con el típico momento romántico de las películas: Él, perdidamente enamorado va en busca de ella hasta llegar a su casa, cuando de pronto ella, abre la puerta, se pone a llover como nunca y se funden un beso.
Si lo leemos así, suena a una cursilada, pero cuando lo vemos en las películas, suspiramos y por nuestra cabeza corre el pensamiento de: ojalá esto me pasara alguna vez.
¿Y a qué viene esto? La verdad es que no lo sé, es algo con lo que he soñado toda mi vida y sigo esperando a que me pase.
Yo no pierdo la esperanza y cada vez que llueve, miro por la ventana y sonrío sin motivo y sin saber por qué. Si llueve y estoy en la calle, escucho la canción apropiada para el momento, sonrío y dejo que la lluvia me empape de arriba a abajo.
Así me siento viva, muy muy viva. Es un momento mágico pero aún lo sería más si tuviera a la persona que quiero a mi lado conmigo.
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